LA COLA DE UHAGON

Existen calles que son famosas por sus bares, por sus tiendas, o la carestía de sus casas. Otras se conocen por su peligrosidad, o por albergar un tipo de negocios.


Pues en Bilbao, existe una, Alcalde Uhagon, que es una cola permanente, vayas a la hora de vayas. En el imaginario popular de los que ya firmamos la cincuentena era famoso por el Búho,s, un antro con Génesis de Karaoke en el que se agolpaban los policías que ocupaban la comisaría aledaña en los años de hierro, desarmados noctambulos y castas que desayunaba cubatas de soberano. Todo gestionado por un tipo de bigote propio con gen y trazas de perdedor del siglo de oro, y una rubia que no sonrió ni en su primera comunión.

De siempre, en su tramo alto, ese que está situado entre Gordoniz y la Plaza de Indautxu, acostumbraba a germinar una hilera de individuos, a la espera de gestionar el DNI o el pasaporte en las dependencias de la Policía Nacional. 

Su longitud depende de las estaciones, más en verano cuando la grey quiere lucir palmito internacional lo que demandaba pasaporte, pero siempre poblada.

Con ejemplares de todas las nacionalidades, con variedad de atuendos estilo festival de folclore de Portugalete, mucho apátrida por los imperativos de la regularización de la situación en tierra extraña, y también ganado nacional. Quizás por ser resguardada por dos policías pertrechados con artillería , pero suele respetarse la línea y la urbanidad y rara vez da la vuelta a la esquina.

Justo en frente de la trasera de esta fila se sitúa una clínica, Indautxu, que hasta ahora no registraba, por lo menos a golpe de vista de peatón, demasiado tráfico. Pero hace unos meses se ha comenzado a gestar espontáneamente una cola que si no fuese porque las separa la carretera, se podría pensar que es continuidad de la primera. Los especimenes que la integran varían con relación a la primera. Súbditos nacionales en su mayoría. y preponderancia de vestimentas informales sin concesión al colorín.

Como no la tutela nadie, la alineación suele ser más destartalada, con trazado sinuoso, gente sentada o repantingada, y poca formalidad. Pero en la práctica, el sumatorio de las dos colas te lleva a que toda la manga derecha de la acera este repleta de individuos que obstaculizan el paso.

Para desvelar el misterio de la cola del hospital he recurrido al adagio latino de piensa mal y acertadas. Al igual que cuando algun varón se suicida o arruina, suele ser in amablemente por mal de amores, drogas/alcohol o juego, en el caso de las colas siempre obedecen a situaciones de necesidad o a la obtención de ventajitas. En este caso, sólo puede ser algo vinculado a la tabarra del covid.

Etiquetas
Compartir
Acerca de Asier Guezuraga Asier Guezuraga Ugalde, nació en Busturia el 9/4/1972. Pasó su juventud en pleno corazón de la Bizkaia profunda, la villa de Gernika, de cuyos recuerdos se nutre este blog. Taurino irredento, hace compatible su odio al fútbol moderno siendo hooligan del Gernika Club, el mejor equipo del mundo hasta que alguien demuestre lo contrario, Juntaletras de novela negra con dos novelas publicadas, apasionado del baloncesto, cocinillas y sobre todas las cosas, muy frikie.
Posts relacionados
GUALTRAPA
MUSEOS
ASUETO