CONTACTOS

Las nuevas tecnologías están preñadas de sorpresas. En cuanto te confías te ves arrastrado al corner como los laterales contra los que el gran Mágico González perpetraba aquel regate que llamaron Culebrilla Macheteada (Ver en You Tube como se postra de hinojos un lateral del Sporting)

Como prueba, los contactos en la agenda del teléfono. Hace años la organización tenía su propio orden de lidia. Primero, te llamaba el que no conocías, segundo, en cuanto colgabas, le incorporabas a la agenda para no descolgar a puerta fría la próxima ocasión, y finiquitabas asignando un nombre o alias que significará algo (para ti)

Por ejemplo, si ponías “Juanjo Pelma 5 de la mañana”; “Elías Vendedor” o “Paula Inquilina,” aquello te aportaba la información justa para advertir de un refilonazo quien te importunaba a las nueve de la noche de un martes festivo. O para encontrar a Miguel Dentista si te había volado un empaste la noche anterior en el último mordisco al torrezno.

Lo que nadie podía imaginarse es que se popularizase el intercambio de contactos vía whatsapp en donde la identificación la asigna el remitente. ¿Qué trae esto consigo? Que el punto de referencia del contacto cambie. Así, lo que para ti era Juanjo Pelma 5 de la mañana porque te diera la turra a esa hora en un garito después de la comida de Navidad,de 1987 te lo manda una madre del grupo de fútbol como Juanjo Aita Cariño.

Con las relaciones personales es cuando la torre de Babel se vuelve inescrutable. Así, te mandan un Manuel Hermano Cuñada Iciar. Y claro cuando al de cinco meses buscas en la agenda un Manuel y te sale un jeroglífico piensas en llamar a Iker Jiménez por si algún fenómeno paranormal ha poseído tu móvil,. No sólo no conoces a Manuel, sino tampoco sabes quién es ni Iciar, ni superas que tuviera un hermano ni que este estuviera casado como para tener una cuñada.

Una de las sensaciones que anidan en todos los que sufrimos este jeroglífico de contactos cruzados es que desarrollamos una capacidad para mantener una conversación de varios minutos con alguien que no tenemos pajolera idea de quien es.  Zafándote por acertarlo antes que el interfecto se de cuenta. A veces esquivas ridículo y otras te explota en la cara, porque te lo pillan al segundo quiero elusivo.

Todos los listos que están leyendo este post dirán este es mongol. No tiene más que cambiar el nombre cuando lo sube a la agenda de su teléfono. Gracias por vuestro consejo, gentes organizadas y cerebrales a las que os sobra el tiempo y afrontáis vuestra existencia con nervios de acero. El común de los mortales, y el menda defendiendo la casamata de los desordenados a los que nos arrostra la vida moderna, os hacemos una cariñosa peineta. Bastante tenemos con responder a tiempo real al estampido de sonidos que proceden del puto teléfono (alertas de un tifón en Teherán, sms de General Óptica, una balacera de whatsapp del grupo de senderismo y medio quintal de mensajes todos los días).

Y por qué no lo dejas? Preguntaran como cuestionaban al yonki irredento en los ochenta que habitaba cerca de la tumba de los Eskorbuto.

Porque no se hacerlo menos mal decía este.


Etiquetas
Compartir
Acerca de Asier Guezuraga Asier Guezuraga Ugalde, nació en Busturia el 9/4/1972. Pasó su juventud en pleno corazón de la Bizkaia profunda, la villa de Gernika, de cuyos recuerdos se nutre este blog. Taurino irredento, hace compatible su odio al fútbol moderno siendo hooligan del Gernika Club, el mejor equipo del mundo hasta que alguien demuestre lo contrario, Juntaletras de novela negra con dos novelas publicadas, apasionado del baloncesto, cocinillas y sobre todas las cosas, muy frikie.
Posts relacionados
ASTE NAGUSI (Y II)
ASTE NAGUSI (I)
VINDICAR