LA HORA

A fuerza de repetir actos idiotas te vas convenciendo de que están plagados de lógica. Por ejemplo, el cambio septembrino de la hora, con la devolución de trastos de este fin de semana.

Hoy es día de niños que se despiertan tarde, ancianos que no duermen a su hora, pastillas que se toman con el café a deshora, citas de amantes malogradas por la impuntualidad, y trenes que se escapan con asientos vacíos.

Miradas de madrugada al reloj sin saber a ciencia cierta si es la hora buena o la que luce en el display, o si ya te han robado la hora que debías con el arte burlesco del juego de triles.

Leeras un artículo sobre la conveniencia energética del trueque y otro en el que personajes afectados atizaran por lo que perrean en su vida cotidiana a causa del mismo. Los mismos artículos que se publicaron el mismo año la misma fecha. Igual que mi aitxitxe hacia en sus crónicas a cada diciembre cuando las titulaba con “El besugo no acudió a la cita navideña” que servía intocable año tras año.

Caducan mañana y floreceran el fin de semana de 2023 en el que vuelvan a perpetrar el horicidio. Sin cambiar una coma. Con su misma carga de superficialidad buenista. Con la levedad de lo que desaparece una vez leído.

Al igual que valdrán las frases que se pronunciaron es tarde cuando el día alargue hasta la noche. Da gusto está luz casi a las nueve de la noche o se nota que se acerca el verano, Porque, por esa tradición cabalistica, el domingo post baile horario siempre hace bueno para honrar las virtudes del cambio.

Lo que da gusto lo buena gente que somos, que nos creemos las mismas milongas y disfrutamos de las mismas cosas tirando de memoria de pez. Aunque sean propias de prestidigitador de circo rancio. De los que venían a Gernika y se les moría el león que echaban al contenedoro utilizaban una piscina con cristal de aumento para que la pescadilla pareciera un tiburón. Y para nosotros era día de fiesta mayor.


Etiquetas
Compartir
Acerca de Asier Guezuraga Asier Guezuraga Ugalde, nació en Busturia el 9/4/1972. Pasó su juventud en pleno corazón de la Bizkaia profunda, la villa de Gernika, de cuyos recuerdos se nutre este blog. Taurino irredento, hace compatible su odio al fútbol moderno siendo hooligan del Gernika Club, el mejor equipo del mundo hasta que alguien demuestre lo contrario, Juntaletras de novela negra con dos novelas publicadas, apasionado del baloncesto, cocinillas y sobre todas las cosas, muy frikie.
Posts relacionados
EL NIÑO GORDO
AFICHE
TAPIOCA