EL PURO

Acabo de leer los comentarios que lanza la parroquia a las declaraciones de Muniain sobre el habano que se ventiló en vacaciones. Desde las movilizaciones con respecto a la fabula de las armas químicas de Irak que nos troleó el trio de las Azores, nada había generado mas consenso critico. Las redes sociales le vituperan.

Cuando yo estoy de acuerdo con todo lo que dice. De cabo a rabo. Puedo diferir en la forma, le sale la vena macarra de la Chantrea y no articula las ideas como Gay de Liebana, (que hoy ha viajado al valle de Josafat sin boleto de vuelta) pero es que tampoco hace falta ser filosofo para ser deportista de élite (ni de tropa rasa).

El éxito pesa mucho más que el fracaso. Y mas en un espacio pequeño como es la villa de Bilbao, en donde, tal y como dice mi colega PR, rige la profecía de los seis pasos. Esa que dice que puedes acceder a cualquier persona que habite en ella saltando seis pasos entre amigos o conocidos comunes.

Suscribo su argumentario. El que un tipo aparentemente triunfador vista exótico, se peine con aroma modernista, conduzca un haiga deportivo y haga gala de poderío económico concita envidias. Puro cainismo lo de atizar al congénere que tiene, o al menos luce, algo de lo que tu careces. Muniain es valiente y no se esconde y eso en esa sociedad esquiva y timorata se paga. Aunque más lo pagaran por carencia aquellos que no saben lo que es disfrutarlo.

Acierta otra vez cuando atribuye el baldón de la foto del puro a la perfidia de quien, arrastrado por esa maldición bíblica de las redes sociales, en lugar de disfrutar de a comida dispara fotos con el movil. Y vuelve a dar en el clavo cuando asegura que, de haber ganado las dos copas, tendría las baldas de su casa repletas de cajas de habanos, ofrenda de todos aquellos que loarían sus triunfos. Cosa de triunfar.

En lo único que creo no anda muy orientado es cuando se defiende alegando el peligro que, para su integridad física, supuso el saltar al campo en la segunda final lesionado. No puedes presumir, y menos envanecerte, por aquello que va de suyo en tu profesión. Lo hiciste, no salió bien y te lo envainas. De lo contrario, te toca tragarte las coplillas que la sabiduría popular dirigía a Manuel Rodríguez “Manolete” cuando sonaba su pasodoble en esas plazas de Dios, Manolete, Manolete, si no sabes torear para que te metes,…

Quiero pensar que el atrevimiento que le brota al Muni viene de su faceta taurina que le hace poner el pecho a la vida citando sin ventajas. A veces le costará un revolcón pero a la larga le cundirá.

Como cunde en la vida ser tu mismo, aunque ha veces te estrelles y entones aquello de “ y en la derrota saber disimular,…” como se cantaba en el fondo de Lasesarre tras el enésimo desengaño.

Gente recia.

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Acerca de Asier Guezuraga Asier Guezuraga Ugalde, nació en Busturia el 9/4/1972. Pasó su juventud en pleno corazón de la Bizkaia profunda, la villa de Gernika, de cuyos recuerdos se nutre este blog. Taurino irredento, hace compatible su odio al fútbol moderno siendo hooligan del Gernika Club, el mejor equipo del mundo hasta que alguien demuestre lo contrario, Juntaletras de novela negra con dos novelas publicadas, apasionado del baloncesto, cocinillas y sobre todas las cosas, muy frikie.
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